lunes, 11 de abril de 2011

Karma.


Ya no sé para quién escribo. Al principio escribía para mí, lo cual era simple, y siempre me preocupaba de que nadie lo leyese. Luego empecé a escribir para los demás, me gustaba publicarlo, y compartir con los demás mis pensamientos. Hace poco, escribía para él. Pero ahora ya no sé para quién escribo.
Creo que debería escribir para los demás, pero de forma que mientras escribo lo haga como si nadie lo fuese a leer, nunca, como si lo fuese a guardar en mi antigua libreta, esa que nunca leyó nadie, hasta que él un día la leyó sin permiso alguno.
Voy a empezar a pensar más en mí. Durante mucho tiempo no me valoraba, en absoluto, y cada día más, me doy cuenta de mi error. Una de las peores cosas que alguien puede hacer es no quererse, da una sensación de... “si ni tú te quieres, dame una razón para que yo te quiera?”. Incluso muestra una debilidad, y una dependencia un poco patéticas.
Cada uno somos como somos, y no por eso somos mejores ni peores. A ver, no voy a mentir, en cualquier sociedad hay una jerarquía, y siempre va a haber gente peor y mejor que tú, sea por belleza, dinero o inteligencia. Pero en el momento en que nos quedamos solos, todos somos exactamente iguales. Y en ese momento, la única persona que nos puede juzgar somos nosotros mismos. ¡Cuánto daño nos hacemos al infravalorarnos debido a las modas de la época! No nos damos cuenta de que al final, el Karma suele hacer bien su trabajo.

2 comentarios:

  1. Hola nose como te llamas, ni como llegue hasta acá pero me sentí bastante tocada con lo que escribiste es todo muy cierto. Yo también escribo para mi misma creo que nadie vio todavía mi blog me sirve de forma de catarsis pienso yo.
    Voy a chusmear un poco mas el tuyo. Saludoss.

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